Cada día estoy más convencida del valor del Acuerdo y de sus ventajas como forma de solución del conflicto: ahorro de tiempo, coste y sufrimiento emocional.

Siempre trabajo en favor de un acuerdo y recomiendo a mis clientes este camino porque a medio plazo ganarán tranquilidad.

Sin embargo a veces me cuesta hacerlo entender pues la negociación requiere

• trabajo por su parte
• esforzarse en aportar ideas
• ser flexibles
• tener paciencia
• actuar con racionalidad
• responsabilizarse del resultado

Y esto es actuar con madurez que no todo el mundo tiene.

Sin embargo, los que sí la demuestran, ganan seguro.

¿Qué valor tiene un acuerdo?

• Tiempo
• Dinero
• Tranquilidad
• Seguridad        

El Valor del Acuerdo está directamente relacionado con el coste del conflicto ya que lo normal será que ponga fin al mismo.

El coste dependerá del tipo de conflicto aunque siempre conllevará el consumo de recursos en tiempo, dinero y salud.

Si comparamos un acuerdo obtenido vía negociación o mediación frente a la resolución en un juzgado, el ahorro de tiempo es considerable y evidente. El tiempo en una procedimiento judicial varía según el tipo, Juzgado, etc.., pero de media cualquier proceso de divorcio con hijos y patrimonio que liquidar conlleva un mínimo de 1 año y hasta 3. En este tiempo puede lograrse perfectamente un acuerdo, si se trabaja para ello.

El valor del Tiempo es indudable para todos los humanos. En un conflicto de ruptura de pareja, ambos tienen que rehacer su vida y el tiempo es muy necesario para reorganizarse a todos los niveles, económico, personal, psicológico, social; la nueva familia tiene que reorganizarse.

El Coste de los profesionales que intervienen en un proceso judicial es mayor que el de los mismos para una negociación. Existen muchos estudios económicos del coste del conflicto. Los autores del proyecto de Justicia descentralizada Deius nos dicen que aproximadamente son 500 euros por persona y 3000 euros el coste por juicio para el Estado, algo que, no olvidemos, pagamos todos.

Y ¿qué pasa con la Salud?. ¿Cómo está una persona durante el tiempo que dura un proceso judicial y se mantiene el conflicto?. La incertidumbre de no saber y la tensión de la confrontación pasan factura. Sin embargo, la negociación preserva la relación, la mejora, y el acuerdo será una prolongación de la voluntad de uno mismo.

En los conflictos de ruptura de pareja con hijos la situación se agrava ya que todo esto afecta además a los menores de una manera importante. La responsabilidad de los padres exige conservar la relación por los hijos comunes y trabajar en favor de un acuerdo adaptado a la situación concreta de esta ,familia y no cometer errores como instrumentalizar a los hijos. Normalmente los conflictos de ruptura de pareja escalan cuando se tramitan vía judicial y se entra en una reciprocidad violenta que tiene “vida propia” y es difícil de parar. La única y verdadera posibilidad de frenar la violencia de un conflicto es no continuar la hostilidad, renunciar a represalias y a la venganza. Así lo afirmar la ciencia del comportamiento humano

Sabiendo que los conflictos son inherentes al ser humano y a las relaciones, la diferencia clave estará en saber gestionarlos de una manera inteligente para lograr soluciones en las que no haya ganadores y perdedores, sino que todos ganen.

La mejor estrategia está en el EQUILIBRIO y éste en logar el máximo beneficio y ganancia en respuesta a la elección del otro, saliendo así ambos beneficiados (cómo nos dice la Teoría de Juegos de Jhon Nash).

Este es el Valor del acuerdo: la ganancia en tiempo, costes económicos, salud y bienestar y el logro de una solución que de verdad atiende los intereses y necesidades de ambas partes de una manera equilibrada, que por ello, se cumplirá, será sostenible en el futuro, mantendrá la relación y habrá instalado el diálogo cómo la mejor manera de gestionar los problemas o dificultades que puedan presentarse en función cambios y nuevas circunstancia.